WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aseguró hoy que hará todo lo que esté a su alcance para ayudar a la isla hawaiana de Maui a «recuperarse y reconstruirse» tras los peores incendios en la historia de este país, que la redujo a cenizas.
Biden visitará mañana la isla en medio de críticas, tanto de la oposición política por el silencio que guardó durante cuatro días tras la tragedia, que ha costado la vida de 114 personas, así como de residentes, que no tienen grandes expectativas ante su llegada o las promesas que les haga tras haberlo perdido todo.
«Mi corazón, mis oraciones y mi enfoque están con las víctimas de los incendios forestales de Maui y sus familias», indicó Biden en un comunicado, previo a reunirse mañana con sobrevivientes y autoridades.
«Sé cuán profundamente la pérdida puede afectar a una familia y una comunidad y sé que nada puede reemplazar la pérdida de una vida», indicó el presidente que hará la visita junto a su esposa Jill.
El demócrata aseguró además a los residentes de Maui que su Administración respetará «las tierras sagradas, las culturas y las tradiciones» en los esfuerzos de recuperación.
La respuesta de Biden a la tragedia, que se desató el 8 de agosto, está en entredicho porque durante cuatro días no hizo ningún comentario público sobre los incendios, los más mortíferos en más de un siglo.
En concreto, Biden habló por primera vez de los incendios el jueves 10 de agosto y no volvió a hacerlo hasta el martes 15, cuando la cifra de fallecidos ya ascendía a 99 personas y cuando ya le habían llovido las críticas por parte de la oposición republicana y de algunos medios de prensa.
La Casa Blanca ha intentado defender la respuesta de Biden y asegura que, aunque no hizo comentaros públicos sobre la tragedia, estuvo constantemente en contacto con la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) para coordinar la respuesta al desastre y garantizar que Hawái recibiera toda la asistencia necesaria.
EFE