BRUSELAS.- Los países de la Unión Europea han trasladado a este viernes el debate diplomático sobre la nueva ronda de sanciones contra Rusia, el sexto paquete correctivo y el más polémico pues contempla un veto a las importaciones de petróleo ruso, aunque por fases y con prórrogas para algunos países.
Los Veintisiete tenían previsto celebrar hoy una reunión a nivel de embajadores ante la UE, que, sin embargo, fue cancelada, por lo que el debate queda retrasado al encuentro ordinario previsto para mañana, informaron a Efe varias fuentes diplomáticas.
El objetivo es que las capitales aprueben las sanciones «de aquí al fin de semana», declaró, por su parte, a la emisora France Info la ministra francesa para la Transición Ecológica, Barbara Pompili, cuyo país ostenta este semestre la presidencia rotatoria del Consejo de la UE.
La quinta y última ronda de sanciones comunitarias contra Moscú desde la invasión de Ucrania, aprobada el pasado 7 de abril, rompió un tabú -dada la alta dependencia de la UE de los productos energéticos rusos- al prohibir las importaciones de hidrocarburos de Rusia, con un embargo al carbón a partir de agosto.
Este sexto paquete correctivo que se debate ahora, en reacción a los presuntos crímenes de guerra de Bucha por parte de las tropas rusas, apunta de nuevo a la energía, con el punto de mira en el petróleo ruso.
Aunque la UE le compra a Moscú el 27 % del petróleo que consume -unos 74.000 millones de euros en 2021- este normalmente se transporta por barco, al igual que el carbón, y por tanto resulta más fácil de sustituir que el gas, que mayoritariamente fluye por gasoductos.
La propuesta de la Comisión, presentada ayer, miércoles, aspira a prohibir las importaciones de petróleo ruso en la UE seis meses después de la entrada en vigor de las sanciones, mientras que en el caso del petróleo refinado el plazo se amplía a ocho meses.
Pero las sanciones requieren unanimidad entre los Veintisiete. Y la Hungría que gobierna Víktor Orban -el líder de la UE más cercano al presidente ruso, Vladímir Putin- y la Eslovaquia que dirige Eduard Heger -que por el contrario ha enviado sistemas de misiles antiaéreos a Ucrania- ya habían avisado de que rechazarían un embargo al petróleo ruso por el impacto que generaría en sus economías.
EFE