CARACAS.- Letonia, una de las sorpresas más importantes del Mundial, cerró su espectacular participación con un merecido quinto puesto tras acabar con Lituania por 98-63.
Letonia no pudo haberle puesto un mejor broche de oro a su primera Copa del Mundo. Lograron un quinto puesto más que merecido para un combinado que exhibió un gran baloncesto en cada partido e hizo disfrutar al espectador. Y con Kristaps Porzingis, su estrella, en la grada.
La sufrieron España, Brasil, Canadá y, sobre todo, Alemania, que vio cómo Davis Bertans tuvo en su mano la victoria que podría haber cambiado el curso del torneo. Pero los cuartos de final fueron el tope en su estelar estreno mundialista que acabó con una victoria a sus compañeros bálticos.
Un partido que, si bien era intrascendente en el Mundial, cobraba relevancia por el sorteo en el preolímpico y en el ránking FIBA. Pero que comenzó con un gesto de hermandad entre ambos países, que se entremezclaron para una foto que pasará a la posteridad.
Eso sí, desde el inicio se palpó que Letonia quería la victoria a toda costa. Un gran inicio de los Arturs Zagars, los hermanos Rodions y Arturs Kurucs o los Roland Smits, entre otros tantos que brillaron, puso ya la primera ventaja en el marcador, un +10 (14-4) que desembocó en el 28-20 al final del primer cuarto.
Más de lo mismo en el segundo. Los de Luca Banchi no relajaron y aumentaron la ventaja hasta los 13 puntos (49-36), aunque encararon el descanso a once (49-36) de los liderados por Jonas Valanciunas.
Pero no fue hasta el tercer cuarto cuando Letonia dio el verdadero golpe sobre la mesa. Con Arturs Kurucs desatado (20 puntos) y con Zagars repartiendo asistencias (17 en total), los letones abrasaron a los lituanos y rubricaron un parcial total de 28-9 que dejó el marcador en un 77-47 para el último cuarto. Una ventaja insalvable para Lituania que estaba contra la lona.
Levantó el pie del acelerador el combinado granate y le dio respiro a Lituania. Valanciunas y Rokas Jokubatis mantuvieron el tipo en el último cuarto en el que había poco que decir.
Letonia arrasó a Lituania en el derbi báltico y cerró su primer Mundial con honor, con un merecido quinto puesto que coloca la primera piedra sobre la que construir el futuro del baloncesto letón.
EFE
