CARACAS.- El 5 de diciembre de 1962 nació el «Barinés de oro», Luis Silva, en el seno de una familia llanera que cultivó esa pasión por el canto y las parrandas.

Es el cuarto hijo de una generación de ocho hermanos criados en el campo, entre el calor del fogón, la brisa llanera y los esteros del pueblito de Santa Rosa en el estado Barinas.

Su adolescencia y su ímpetu de ser grande lo motivan a salir de su terruño para realizar un viaje hacia Maracay, porque quería conocer «mundos nuevos».

Es precisamente en esa tierra donde descubrió que se dedicaría de lleno a interpretar la música llanera, porque las personas que veían sus espectáculos, colaboraban con dinero.

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«Comencé a cantar desde mi infancia, cuando tenía ocho años de edad. Hacíamos unas parranditas y mi papá siempre llevaba algunos cuatros rotos. Yo los arreglaba y agarraba para mí. Cantábamos todo tipo de música», dijo.

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Su primera producción discográfica titulada “Cimarrón”, lo llevó a la realización de 19 discos cargados con un sin número de éxitos aclamados por el público y destacados en la cartelera nacional de manera consecutiva; tales como “Ella o él», «A quién no le va a gustar», «Como no voy a decirlo»; «La diosa y el pecador», «Quisiera ser», «Romance quinceañero»; entre otros.

Así Luís Silva forjó con tenacidad los primeros peldaños de su carrera musical y los lugares de sintonía en las radios del país.

El propósito del intérprete es conseguir un premio Grammy y ser uno de los máximos exponentes de la música llanera en el mundo.

«Son 40 años de carrera artística, 21 discos, éxitos, premios nacionales e internacionales. Actualmente, estoy trabajando en una nueva producción, pero no puedo dar detalles»; comentó.

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«He tenido muchos triunfos y muchas victorias, pero aún así, todavía sigo soñando cada día»

Jean Carlos González/ Unión Radio