CARACAS.- La crisis del Nápoli continuó este viernes al ser incapaces de pasar del empate 0-0 ante Monza en el cierre del año 2023.
Nada que ver el Nápoli de unos pocos meses atrás, cuando se proclamó campeón de la Serie A con un fútbol fresco y un rendimiento sobresaliente, pujante, al que casi ningún equipo de su liga podía hacer frente.
Tiempo después, en el ecuador de una nueva temporada, el conjunto de Walter Mazzarri, expulsado por doble amonestación, impotente ante la falta de argumentos de su equipo, el conjunto napolitano está fuera de los puestos europeos, irrelevante en la puja por el scudetto.
No fue la única roja del tramo final. Ninguna en el césped. El preparador visitante Raffaele Palladino y el suplente Mirko Maric también tuvieron que irse del banquillo.
En su arranque de la decimoctava jornada daba la sensación de poder poner fin al bache a pesar de las ausencias del nigeriano Victor Osimhen, que se irá además a la Copa África y de Matteo Politano, ambos sancionados por la expulsión sufrida ante el Roma. Solo un partido ganado en los últimos cinco. Con tres derrotas y un empate en la hoja de servicios del Nápoli.
Ni siquiera es fiable en el estadio Diego Armando Maradona donde ya lastra cuatro partidos perdidos. Este pudo ser el quinto porque fue de más a menos y el Monza, inofensivo, amable en muchas fases, tuvo la ocasión más clara con un penalti y con varios contraataques a campo abierto, con su rival descolocado.
Fue dramático el tramo final, con el Nápoli frustrado, incapaz de llevar a la red ocasiones como la de la media hora de Giacomo Raspadori, de cabeza, que salió fuera por poco.
O la siguiente, de Andre Zambo Anguissa, cuando el conjunto de Mazzarri aceleró justo antes del intermedio, con una volea tras un pase de Mario Rui que detuvo el portero Michele Di Gregorio. A un paso del intermedio la ocasión fue del georgiano Khvicha Kvaratskhelia, también tras recibir un balón de Mario Rui que se marchó fuera.
Emergió unos minutos Kvaratskhelia que pudo adelantar al Nápoli cerca de la hora de partido, tras una pared con Giacomo Raspardori que obligó a Di Gregorio a lucirse de nuevo.
La frustración invadió al Nápoli que se salvó de una situación peor cuando en uno de los pocos ataques del Monza, un barullo en el área local después de un tiro de Lorenzo Colombo que despejó el meta Alex Meret acabó con un tiro de Andrea Copani que pegó en la mano de Mario Rui. Fue penalti y lo ejecutó muy mal Matteo Pessina.
Su remate fue flojo y mal colocado. Meret lo atrapó.A la desesperada en medio de un tramo final embarrado en los banquillos, con expulsiones de los técnicos, la última ocasión fue para Gianluca Gaetano que recibió un pase de Giovanni Simeone.
Definió mal. Detuvo Di Gregorio.Queda séptimo el Nápoles. Fuera de europa. Igualado a puntos con el sexto, el Roma, que el sábado visita a la Juventus en Turín.
EFE
