CARACAS.- La doctora Patricia Valenzuela, reconocida infectóloga e internista y presidenta de la Sociedad Venezolana de Infectología, alertó sobre la creciente crisis de resistencia a los antimicrobianos, destacó que se ha convertido en una de las principales amenazas para la salud global. Afirmó que «cada año, millones de personas en todo el mundo enfrentan infecciones que no responden a los tratamientos convencionales debido a esta resistencia».
«Ésta situación es a nivel mundial, se precipitó de manera importante en la pandemia del COVID-19, ésto fue porque no sabíamos como se iba hacer el abordaje terapéutico, se utilizaron antibióticos ya que era difìcil hacer un diagnóstico diferencial entre la afectación pulmonar que se daba y entre la teoría viral bacteriana, entre las hospitalizaciones graves eso trajo como consecuencia la resistencia a los antimicrobianos».
Valenzuela explicó que el agravamiento de ésta crisis es porque una vez que el daño está hecho persiste, la resistencia a los antimicrobianos no se elimina con la facilidad que se quiere. Una vez que los mecanismos de resistencia en la bacteria se establecen, quitarlo no es fácil y se propagan de generación en generación entre enfermedades; también es importante hacer diagnósticos de los microorganismos que se van a tratar.
Instó que se deben tomar medidas para la prevención y el combate de esta crisis: No automedicarse, vacunarse, lavarse las manos, restringir el exceso de antibióticos pero no de manera aislada. Nunca es tarde pero no hay que esperar que las cosas se compliquen para actuar.
Subrayó Valenzuela que «en el país estamos cortos de nuevas generaciones de antibióticos y eso tambien nos limita y pone en probabilidades de morir en alta, o mayor estancia hospitalaria, gastos del bolsillo y definitivamente pueden dejar secuelas dependiendo de la enfermedad».
En entrevista concedida a Vanessa Davies para el programa La Frecuencia de Hoy de Unión Radio, la doctora hizo el llamado a la prevención y conocimiento en las bacterias intrahospitalarias, porque no solo es hacer identificación, pedir consulta con los infectólogos, sino tener en mente que hay que tomar una muestra de la zona con la infección para mandarlo a cultivar y obtener el resulatdo de la bacteria para diagnosticar tratamiento.
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Lismar Rebolledo/Unión Radio
