CARACAS.-Cada 9 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Adopción, un proceso que brinda un entorno familiar a los niños que lo necesiten, y que puede vincularse a múltiples causas.
Este camino requiere que los futuros padres tengan conocimiento de sus propios sentimientos, de los sentimientos de la pareja, de la respuesta familiar y social y de lo que es imprescindible para subsanar las carencias de niños adoptados.
Un niño adoptado es un niño abandonado, y el abandono causa una ruptura del vínculo que dejará una herida en el niño y que le generará un apego inseguro. Tras un periodo de tiempo con la familia adoptiva los porcentajes de apego aumentan debido a que existe una relación próxima y positiva.
La adopción es un proceso reparador que permite al niño favorecer un espacio de fortalecimiento que le ayuda a un transitar de vida mucho más armonioso y que se traduce en la posibilidad de construir un individuo con capacidad de inserción social y en consecuencia una persona exitosa.
Miguel Fernández, padre adoptivo, aseguró que no hay mayor recompensa que la sonrisa de su hijo cada mañana, «Levantarte en la mañana, que de los buenos días y te diga papá te amo, más allá de que suene un cliché es suficientemente compensatorio», dijo.
En Caracas las instituciones de mayor prestigio para realizar este proceso es el Fundana, Hogares Bambi, y el Idena.
Paola González / Unión Radio