CARACAS.- El sociólogo Edison Arciniega, director ejecutivo de Ciudadanía en Acción y especialista en Seguridad Alimentaria, advirtió que si en Latinoamérica podrían quedar 14 millones de personas sin acceso a los alimentos, como dice la ONU, “lo probable es que nosotros tengamos 4 millones”.
No obstante, destacó que el Ejecutivo Nacional, por vía del Consejo Superior de Economía y del ministerio de Alimentación, se está sentando con toda la cadena insumo-productos de los 11 rubros sujetos a supervisión. “Ahí está la harina, los cereales junto con las principales fuentes calóricas y proteicas”.
“Es una medida positiva siempre y cuando se haga a la luz del mercado y no implique el regreso a los esquemas de controles draconianos”, subrayó en entrevista con Ginette González y Andrés Rojas en el programa 2 + 2 de Unión Radio.
Aboga por la concertación entre el sector público y privado. ”Mientras más sinergia y planes mixtos se construyan, mientras la respuesta de emergencia no atente contra los mercados, más sostenibles serán las repuestas”.
Señaló que Venezuela, además de sus problemas internos, está enfrentando las 7 grandes crisis alimentarias globales, entre ellas “la de los fertilizantes. «Tenemos graves problemas con la urea, entre 17 y 18 % de los volúmenes que se requieren para la producción de alimentos no están disponibles en el mercado internacional, eso responde a la guerra entre Rusia y Ucrania”.
“Tenemos la crisis de los fosfatos que se debe a la contención de las exportaciones por parte de Marruecos, entre 4 y 8 %”,
Admitió que parte de los problemas que tiene Pequiven se deben a la escasez de urea y fósforo a nivel mundial. “Si no tuviéramos la crisis porque la empresa solo está operativa en 15 % de su capacidad, estaríamos exportando urea y fertilizantes formulados porque la mayor instalación petroquímica en América Latina la tenemos nosotros”.
Destacó la crisis de los contenedores que ha incrementado hasta en 500 % los precios. “En nuestro caso se complica aún más porque tenemos un problema de calado en nuestros puertos y cada vez son más escasos los barcos de calado menor”.
Por otro lado, destacó que Venezuela es un país altamente importador “dependiente en dos tercios de la cadena de valores de penetrada por productos importados”.
Al referirse a la crisis del combustible, agregó que somos dependientes de las importaciones de productos refinados y el precio promedio internacional del diésel esta en $ 1,39 «y este elemento nos complica porque nos encarece las estructuras de costo”.
Apuntó que a eso hay que sumarle la crisis climática “dos grandes sequías, una en la costa pacífica de Norteamérica que va desde México hasta Canadá que está afectando producción de carne, cereales y leche y una gran sequía en la Cuenca del Paraná, en el sur de nuestro continente, que está afectando la producción de cereales y soja”
“Nosotros somos importadores netos de todos estos rubros con excepción de la carne y ya lo va sintiendo el consumidor en los anaqueles”, advirtió.
Asimismo se refirió a la crisis del crédito producto del aumento de las tasas de interés que están haciendo los bancos centrales de los países desarrollados, eso incrementa el valor del dinero y eso implica una ralentización de las inversiones y la disminución de las actividades económicas y, en nuestro caso se incrementarán los precios”.
Califica de “abismal” la crisis de los cereales protagonizada por el trigo cuyo “precio se ha incrementado 70 %, hay una caída que podría llegar a 25 % del trigo fuera del mercado a finales de año, esto está afectando la producción de soja, canola y girasol”.
En su opinión, actualmente se están conjugando la crisis climática con la guerra entre Rusia y Ucrania.
Finalmente esta la crisis más particular, la desglobalización, los países están construyendo mayores niveles de autarquía, hay países parando sus exportaciones de alimentos y fertilizantes para construir reservas nacionales”.
Precisó que en los últimos 3 meses la inflación acumulada en el sector de alimentos en el país es de aproximadamente 18 % “concentrados en rublos estratégicos y por primera vez “responde a un componente endógeno”.
Sonia Pomenta Llaña/Unión Radio