LISBOA.- El papa Francisco abandonó hoy Lisboa para regresar a Roma tras participar en la Jornada Mundial de la Juventud, que ha reunido a más de un millón y medio de fieles durante esta semana en la capital lusa.
El papa despegó de la base militar de Figo Maduro a las 18.22 hora local (17.22 GMT) a bordo de un avión A321 de la aerolínea portuguesa TAP que le conducirá al aeropuerto romano de Fuimicino.
El pontífice avanzó por la alfombra roja colocada al pie del avión en silla de ruedas y fue despedido en el aeropuerto lisboeta por el presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa, y el primer ministro, António Costa, y una representación del Gobierno
En el trayecto a Roma, podrá disfrutar de un menú preparado por el chef luso Vitor Sobral, elaborado íntegramente con productos portugueses, regado con vinos del país y con el tradicional Oporto.
Miles de personas saludaron el paso de la comitiva papal durante los 20 kilómetros que separan Algés, donde encabezó el último acto en Lisboa con 25.000 voluntarios de la JMJ, hasta la base militar.
El papa llegó a la capital lusa el pasado día 2 con una apretada agenda en la que ha podido reunirse con víctimas de abusos, peregrinos, voluntarios y visitar el santuario de Fátima.
Más de un millón y medio de fieles le arroparon en la vigilia y la misa de despedida que ofició hoy a orillas del Tajo, en una explanada equivalente a un centenar de campos de fútbol.
Esta ha sido la segunda visita a Portugal del pontífice argentino, de 86 años, que en 2017 estuvo en el santuario de Fátima.
EFE
