BUENOS AIRES.- La sociedad argentina recibe 2024 conmocionada por varios crímenes sucedidos en un trágico fin de semana de Año Nuevo, en el que fallecieron en circunstancias violentas al menos cinco personas.
El sábado, en Chascomús (provincia de Buenos Aires), un joven agente de la Policía de la Provincia habría acabado con la vida de su padre, Diego Reddy; su esposa, María Eugenia Suárez, y su pequeño hijo de 12 años y medio hermano del presunto asesino, Ignacio Reddy.
En un principio, el sospechoso, Francisco Reddy, habría asesinado de un disparo a la mujer y al niño, golpeándolo con la culata de su arma, informaron fuentes policiales.
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Los médicos consiguieron llegar al lugar del crimen al ser alertados por el administrador de la finca donde se cometieron los asesinatos.
Al padre, que permanecía desaparecido y era el primer sospechoso para los agentes, lo hallaron horas después sin vida entre unos pastizales.
Un día más tarde, en plenas celebraciones por el Año Nuevo, otra muerte violenta tuvo lugar en el paseo costero de la localidad turística de Santa Teresita (provincia de Buenos Aires).
Un grupo de jóvenes le propinaron puñetazos y patadas a un joven de 18 años, Tomás Tello Ferreira, antes de apuñalarlo en el pecho con un arma blanca.
EFE