BRUSELAS.- La Comisión Europea destinó hoy cerca de unos 8 millones de euros a España, según precisaron fuentes comunitarias a EFE, para la adquisición de refugios de emergencia que puedan desplegarse rápidamente en caso de catástrofe o crisis.
Este pago forma parte de una inversión total de 116 millones de euros que el Ejecutivo comunitario repartirá, además de con España, también entre Croacia, Polonia, Eslovenia, Suecia y Turquía.
El desembolso pretende reforzar la reserva europea propia de refugios móviles para población afectada por catástrofes, bautizada como «RescEU«, y que está pensada para ser activada cuando las crisis desborden los recursos o la capacidad de respuesta de un país.
Los primeros nuevos refugios anunciados hoy estarán disponibles a partir del año que viene, según informó la Comisión en un comunicado, con el objetivo de ayudar a los países que deban afrontar una catástrofe natural, un accidente o una llegada sobrevenida de migrantes o refugiados, por ejemplo.
Con la partida comprometida de 116 millones de euros, Bruselas detalló que se adquirirán refugios «de alta calidad», en forma de estructuras prefabricadas, contenedores planos o tiendas de campaña, pensados para ser desplegados rápidamente.
El comisario europeo de Gestión de Crisis, Janez Lenarcic, aseguró en un comunicado que la adquisición de más refugios de emergencia supone «un paso importante en la respuesta de la UE a las crisis«, ya que, según dijo, mejora «la preparación ante movimientos repentinos de personas a gran escala».
«El alojamiento es una necesidad humana básica, pero es mucho más que un techo: proporciona seguridad, protección y dignidad a las personas desarraigadas de sus hogares», añadió Lenarcic.
Gracias a la reserva ya existente de refugios, la UE ha desplegado más de 3.000 centros de alojamiento en Ucrania y en países como Eslovaquia que han lidiado con la llegada de refugiados.
Según precisó la Comisión Europea, Turquía recibió 500 unidades de refugio y 2.000 tiendas de campaña de emergencia tras los terremotos que afectaron en febrero al sureste del país y a Siria.
EFE
