Roma.- El griego Stefanos Tsitsipas accedió este miércoles a los octavos de final del Masters 1.000 de Roma tras un duro partido a tres sets en el que búlgaro Grigor Dimitrov estuvo a punto de dar la sorpresa y llevarse el triunfo, pero terminó pereciendo 6-3, 5-7 y 7-6 (4).
El griego casi tropieza en la tierra batida del Foro Itálico donde se disputa este abierto de Roma. El cuarto cabeza de serie sufrió mucho más de lo esperado ante un búlgaro que casi logra la hazaña.
Tsitsipas celebró aliviado el triunfo en segunda ronda. Puños al aire y ojos cerrados, con la sensación de haberse quitado un peso de encima, un sufrimiento que no esperaba en su debut de esta edición. Y eso que comenzó bien.
El primer set fue claramente del heleno, que se puso 3-0 arriba al romperle al búlgaro un break que le bastó para encarrilar el envite y en el que era seguro que no se esperaba la reacción posterior.
Pero Dimitrov igualó la batalla en un segundo parcial en el que se mostró más sólido, pese a ceder un servicio primero, y en el que hizo dudar al griego al devolverle el golpe con dos roturas de servicio con las que se agenció esta manga.
En la manga definitiva volvió a reinar la igualdad y Dimitrov, arropado por el público italiano, sacó a relucir sus mejores derechazos en los momentos clave, pero Tsitsipas es mucho Tsitsipas. El heleno no dejó de luchar y defendió una bola de partido en su contra para rubricar el 5-5 en el marcador y otra para poner el 6-6. Dimitrov había desaprovechado dos oportunidades de oro para estar en octavos, y Tsitsipas se lo hizo pagar.
Con la condición de cuarto cabeza de serie y número cinco del mundo, no podía permitir irse a las primeras de cambio. En el tie-break definitivo reapareció el habitual Stefanos y rubricó un 5-1 con el prácticamente selló su pase. Reaccionó el búlgaro, pero no fue suficiente, la ventaja ya era demasiado amplia.
En octavos, el griego se las verá con el martillo ruso Karen Khachanov, que apeó del torneo al español Pablo Carreño.
EFE