VIENA.- La reunión de los 13 países de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), celebrada este sábado en Viena, ha terminado sin que se hayan anunciado decisiones para la crucial conferencia de mañana, domingo, con sus diez aliados, entre ellos Rusia, en la que decidirán cuál será el nivel de su producción de petróleo en los próximos meses.
La 176 conferencia ministerial de la OPEP empezó sobre las 12.00 h (10.00 GMT) y terminó unas dos horas más tarde, aparentemente en una atmósfera relajada, pero sin que se dieran a conocer detalles sobre la postura de la organización ante la reunión del domingo.
El encuentro de mañana reúne a los 23 miembros de la llamada OPEP+, una alianza creada en 2016 entre los 13 países de la OPEP y otros diez Estados productores, entre los que destaca Rusia, y ha despertado una gran expectativa en los mercados del crudo.
Los inversores en el sector están a la espera de conocer si la OPEP, responsable del 40 % de la producción mundial de crudo, cerrará los grifos por tercera vez desde octubre, o dejará sin cambios el nivel actual de su bombeo.
Tras mantener una clara tendencia bajista en las últimas semanas, los «petroprecios» terminaron la semana al alza, impulsados por la aprobación en Estados Unidos de una ley para subir el techo de deuda y evitar así que el país entre en suspensión de pagos.
El barril del petróleo Brent quedó el viernes en Londres a 76,08 dólares, un 2,45 % más que al cierre de la sesión anterior, mientras que el del precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) avanzó un 2,64 %, hasta 71,74 dólares, en Nueva York.
Estas cotizaciones siguen estando muy por debajo de las superiores a los 100 dólares/barril que había hace un año y no satisfacen a la OPEP+, que lleva meses intentando sin éxito conseguir un nivel superior a los 80 dólares.
Por otro lado, la OPEP ha negado, sin dar explicaciones, la acreditación para cubrir las conferencias ministeriales de este fin de semana a varios medios internacionales, entre ellos Reuters, Bloomberg y Wall Street Journal, lo que ha suscitado protestas de las asociaciones de prensa austríacas.
En cambio, periodistas de otros medios, como EFE, AFP, DPA o el Financial Times han recibido invitaciones personales e «intransferibles», una forma de proceder no vista en las cumbres de la organización del último cuarto de siglo.
EFE