CIUDAD DE PANAMÁ.- Las autoridades de Panamá elevaron a 40 la cifra de muertos, entre ellos niños, en el accidente de un autobús que llevaba este miércoles migrantes irregulares hacia un albergue situado cerca de la frontera con Costa Rica.
En el accidente, ocurrido alrededor de las 4.00 hora local (9.00 GMT) en Gualaca, un área de la provincia occidental de Chiriquí, situada a unos 450 kilómetros de la capital panameña, resultaron heridas más de 20 personas, según las autoridades.
Una fuente del Ministerio Público (MP, Fiscalía) dijo a EFE que uno de los lesionados murió cuando era atendido en un hospital, subiendo a 40 la cifra de víctimas fatales en el accidente.
Entre los heridos hay una decena de niños de entre 5 y 11 años, tres de los cuales se encontraban en condición crítica en el hospital infantil de la ciudad de David, capital de Chiriquí, según explicó el director médico de la institución, Johny Parra.
La especialista de protección en emergencias de Unicef, Diana Romero, dijo a EFE que el ente de la ONU lamentaba «profundamente» este accidente «que involucra a varios niños y niñas que apenas hace unas horas estábamos atendiendo en Darién», la provincia panameña fronteriza con Colombia por donde llegan miles de migrantes irregulares de todo el mundo que viajan hacia Estados Unidos.
En otro hospital de la ciudad de David se encontraban 23 heridos, una docena de los cuales estaba en condición grave en unidades de cuidados intensivos, dijeron fuentes médicas.
Las autoridades de Panamá no han informado públicamente de la edad ni nacionalidad de los fallecidos, que se presume sean en su mayoría migrantes en tránsito hacia Norteamérica.
La subdirectora del Servicio Nacional de Migración (SNM), María Isabel Saravia, dijo en una conferencia de prensa que entre los fallecidos hay niños viajaban 20 menores en el autobús así como un ciudadano panameño que era uno de los dos conductores.
Saravia precisó que en el bus viajaban «66 personas no nacionales» de Panamá. Se limitó a decir que dentro del listado había ciudadanos africanos y de países de Suramérica como Brasil y Ecuador, y que el Ministerio de Exteriores se está comunicando con los distintos gobiernos.
La Cancillería de Cuba confirmó este miércoles, sin precisar el número, que hay ciudadanos de la isla entre los muertos, mientras que el Gobierno de Colombia expresó «sus más sentidas condolencias a los familiares de las víctimas, colombianas y de varios países hermanos».
EFE