AMÁN.- El rey jordano, Abdalá II, instó este domingo a que se trabaje con «rapidez» para «imponer la estabilidad» en Siria después de que los insurgentes controlaran Damasco este domingo y derrocaran al presidente sirio, Bachar al Asad, informaron fuentes oficiales.
«El rey Abdalá II afirmó mientras presidía una reunión del Consejo de Seguridad Nacional, que Jordania apoya a los hermanos sirios y respeta su voluntad y sus elecciones», indicó la agencia oficial de noticias jordana, Petra, que añadió que el monarca subrayó «la necesidad de trabajar con diligencia y rapidez para imponer la estabilidad y evitar cualquier conflicto que pueda conducir al caos».
Quiso destacar que Jordania «siempre ha apoyado a los hermanos sirios desde el comienzo de la crisis y abrió sus puertas a los refugiados durante la última década, brindándoles diversos servicios, incluidos salud, educación y otros, al igual que los jordanos».
El rey señaló que las Fuerzas Armadas de Jordania y los servicios de seguridad han trabajado «con gran esfuerzo en los últimos años para mantener la seguridad de la patria y sus fronteras, subrayando que seguirán siendo el ojo guardián en la protección de Jordania y los jordanos y preservar los intereses de la patria».
El pasado viernes, el Gobierno jordano anunció el cierre del cruce fronterizo de Yaber, que conecta con Siria, debido a «las condiciones de seguridad» en el país.
Jordania hace frontera con la provincia de Deraa -la cuna de las revueltas populares contra Al Asad en 2011-, Al Sueida -de mayoría drusa y que ha presenciado en los últimos años manifestaciones contra el presidente- y la provincia de Homs.
Jordania es uno de los países más afectados por la crisis siria y acoge al segundo mayor número de refugiados per cápita del mundo, y la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) tiene registrados unos 730.000 refugiados, en su mayoría procedentes de Siria, con grandes grupos de Irak, el Yemen, Sudán y Somalia.
EFE