LIMA.-Las seis semanas de protestas en Perú han dejado pérdidas por más de 500 millones de dólares en la mayoría de actividades económicas del país por los bloqueos y paros impuestos por los manifestantes.
Cuando los actores económicos pensaban que la salida del izquierdista Pedro Castillo de la Presidencia, por un intento fallido de golpe de Estado, traería mejoras a las expectativas macroeconómicas del país, las protestas recrudecieron y demandaron también la renuncia de su sucesora Dina Boluarte.
Transcurridas seis semanas de protestas, con una semana de tregua por Navidad, las pérdidas económicas se han elevado a 2.150 millones de soles (unos 554 millones de dólares), según confirmó esta semana el ministro de Economía, Alex Contreras.
Las regiones más afectadas son las sureñas Cuzco, Madre de Dios y Puno, que presentan bloqueos en las carreteras desde diciembre y ya sufren desabastecimiento de combustibles y un elevado precio en los alimentos.
Contreras estimó que si no se consigue una diálogo rápido entre las partes y el conflicto se mantiene, la economía peruana solo crecerá 2 % en el primer trimestre de 2023, pero si hay una reactivación como consecuencia de un consenso político, el alza del PIB sería de al menos 3 %.
No obstante, la inflación analizada en enero bordeará muy posiblemente el 9 % precisamente por las protestas, adelantó el ministro, aunque confió en que sea un incremento temporal.
EFE