TEHERÁN- El presidente de Irán, Ebrahim Raisí, prometió este viernes que castigará “con determinación” a los manifestantes que protestan pidiendo el fin de la República Islámica, un día después de la primera ejecución de una persona condenada por participar en las movilizaciones.
“Perseguiremos con determinación la identificación, el juicio y el castigo de los perpetradores del asesinato de las fuerzas de seguridad”, afirmó el mandatario en una ceremonia en honor de los efectivos de seguridad muertos en las protestas.
Raisí indicó que los “enemigos buscan dañar los valores de la Revolución Islámica” con una «nueva guerra combinada».
“Los enemigos afirman que defienden la vida de los iraníes pero en la práctica asesinan a inocentes”, aseguró.
Las autoridades iraníes ejecutaron ayer por la mañana a Mohsen Shekari, en el primer ahorcamiento de un manifestante condenado a muerte por participar en las protestas desatadas por la muerte de Mahsa Amini bajo custodia policial.
Shekari, de 23 años, fue condenado a la pena máxima por herir a un basiji -miliciano islámico- con un cuchillo y bloquear una calle en Teherán.
EFE