LONDRES.- Gran parte de los servicios ferroviarios en el Reino Unido quedaron suspendidos desde este viernes hasta el sábado por la noche por una nueva huelga de transporte, que se suma a otros paros en el aeropuerto de Heathrow y en los autobuses de Londres.
En torno al 20 % de los trenes programados circulan entre las 7.30 horas de la mañana y las 6.30 de la tarde (hora local), mientras que fuera de ese horario no están previstas salidas.
Empleados de 14 compañías de tren y el operador de vías Network Rail mantienen el pulso al Gobierno que iniciaron en junio para exigir mejoras salariales, tras haber detenido ya gran parte de la red ferroviaria el martes y el miércoles de esta semana.
El secretario general del sindicato RMT, Mick Lynch, reiteró este viernes que es necesaria una «mejora de la oferta» sobre la mesa para incrementar los salarios, aunque abrió la puerta a una eventual solución al asegurar, tras varios meses de disputa, que «se pude lograr» un acuerdo.
Los afiliados del sindicato han rechazado una oferta para incrementar los salarios un mínimo del 9 % en dos años y han convocado paros similares al de hoy los próximos 3, 4, 6 y 7 de enero.
También detuvieron su actividad este viernes, durante 72 horas, cerca de 400 porteadores de equipajes de la empresa Menzies en el aeropuerto londinense de Heathrow, el principal del país.
Un portavoz del aeródromo aseguró que «la gran mayoría de los pasajeros no se verán afectados» por esa huelga y subrayó que durante este viernes no se han producido cancelaciones de vuelos «como resultado directo» del paro.
Al mismo tiempo, numerosas líneas de autobús del sur y el oeste de Londres se vieron afectadas durante la jornada por el paro convocado por trabajadores de la empresa Abellio, una de las firmas subcontratadas por el ayuntamiento de la capital británica para operar autobuses urbanos.
Cerca de cien trabajadores de seguridad en el Eurostar suspendieron anoche la huelga programada para hoy al haber recibido una oferta por parte de la empresa sobre la que votarán el próximo lunes, si bien mantienen por ahora los paros convocados el jueves y el viernes.
Las huelgas de hoy se producen después de que decenas de miles de enfermeros y enfermeras detuvieran la víspera su actividad para exigir una mejora salarial de 19 %.
Cuestionado por esa huelga sanitaria, el primer ministro británico, Rishi Sunak, reiteró hoy su negativa a negociar una subida de sueldo superior al 4,75 % que se ha ofrecido a los enfermeros, al considerar que la oferta sobre la mesa es «apropiada y justa».
«Queremos ser justos, razonables y constructivos. Por eso hemos aceptado las recomendaciones del organismo independiente sobre salarios (del sistema público de salud)», recalcó el jefe de Gobierno.
Con el Índice de Precios Minoristas (RPI, en inglés) disparado hasta el 14 % en noviembre, el Ejecutivo británico continuará bajo presión con numerosas huelgas programadas antes y durante el periodo navideño.
Los enfermeros volverán a detener su actividad el día 20, una día antes de la huelga programada de conductores de ambulancia y otros empleados de servicios de emergencias.
Los días 23 y 24 está convocado asimismo un nuevo paro de trabajadores de la antigua empresa de correos Royal Mail.
EFE