BRUSELAS.- La presidenta de Moldavia, Maia Sandu, afirmó que no ve riesgos inminentes de que las hostilidades de la guerra en Ucrania se extiendan a su país y aseguró que la nación tiene planes de contingencia para escenarios «pesimistas».
«No vemos ninguna amenaza inminente para el futuro más cercano, pero por supuesto tenemos planes de contingencia para tales escenarios, que son menos optimistas o pesimistas», señaló la política proeuropea y liberal en una rueda de prensa junto al presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, en Chisinau.
«Quisiera subrayar que no vemos ningún riesgo inminente en este momento», agregó, tras afirmar que por supuesto los incidentes ocurridos hace varios días en la región separatista prorrusa de Transnistria «son preocupantes».
La semana pasada en Transnistria ocurrieron una serie de tiroteos y explosiones en edificios e infraestructuras que los separatistas prorrusos tratan como ataques terroristas y atribuyen a Ucrania, mientras que Kiev asegura que se trata de una operación de «falsa bandera» de Rusia para culparle de los ataques.
«Nuestra evaluación ha mostrado que esos incidentes han sido causados por fuerzas pro-guerra dentro de la región. Al mismo tiempo hemos escuchado amenazas de generales rusos sobre sus intenciones de llegar a Transnistria y por supuesto estas declaraciones son irresponsables y preocupantes», afirmó Sandu.
La presidenta de Moldavia se refirió al jefe en funciones de la Circunscripción Militar Centro, general mayor Rustam Minnekéyev, quien afirmó el 22 de abril que Rusia quiere controlar el sur de Ucrania, además del este, no solo para establecer un corredor terrestre desde el Donbás a Crimea, sino también para crear un punto de acceso a Transnistria.
EFE