CIUDAD DE MÉXICO.- El Gobierno de México desplegó a más de 8.500 elementos de las Fuerzas Armadas y de otras dependencias ante el próximo azote de Beryl, el huracán más intenso para esta etapa temprana de la temporada del Atlántico y que este jueves impactaría a la península de Yucatán, en el Caribe mexicano.
Este operativo contempla 2.134 soldados y 40 vehículos del Ejército, 1.676 oficiales y 35 vehículos de la Guardia Nacional, y 1.128 elementos, 80 vehículos, cinco hospitales móviles y una unidad móvil de comunicaciones de la Marina, expuso este miércoles Laura Velázquez, coordinadora nacional de Protección Civil.
También, hay 1.388 agentes de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Quintana Roo y 2.209 funcionarios de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que de igual forma dispone de 572 vehículos, 360 grúas, 68 plantas de emergencia, seis vehículos todo terreno, 27 equipos de comunicación y cinco helicópteros.
Por otro lado, el estado de Quintana Roo, principal destino turístico de México por albergar a Cancún y la Riviera Maya, habilitó 112 refugios temporales para albergar a casi 21.000 personas, detalló Velázquez en la conferencia matutina del Palacio Nacional.
Por ahora, Beryl mantiene la categoría 4 a 200 kilómetros al sureste de Kingston, Jamaica, y a 1.300 kilómetros al este-sureste de Cancún, según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
La titular de Protección Civil aseguró que «en este momento, el huracán Beryl no afecta a costas nacionales», pero «se estima que el ingreso a territorio nacional sea por la noche del jueves 4 de julio o en la madrugada del viernes 5 de julio en el estado de Quintana Roo, entre Tulum y Carillo Puerto».
También alertó de que, tras cruzar la península de Yucatán y avanzar por el Golfo de México, tocaría tierra por segunda vez entre el domingo y el lunes entre los estados de Veracruz y Tamaulipas, fronterizo con Estados Unidos.
De los tres ciclones que ha habido en este temporada del Atlántico, Beryl sería el tercero en impactar México, donde el domingo ingresó la tormenta Chris, que dejó inundaciones en el centro y oriente del país.
Mientras que la tormenta Alberto, que tocó tierra el 20 de junio, dejó seis muertos en Nuevo León, estado de la frontera norte de México, y destrozos e inundaciones en Monterrey, la segunda ciudad más poblada del país.
Las autoridades mexicanas pronosticaron en mayo hasta 41 ciclones con nombre en el océano Atlántico, con hasta 50 % más tormentas del promedio, y el Pacífico, con un 10 % más fenómenos, de los que al menos cinco impactarían al país.
EFE