LIMAS.- Lima y cuatro provincias más de Perú vivieron este domingo su primer día desde el inicio de la pandemia en el que la mascarilla no es obligatoria al aire libre, pese a lo que muchos ciudadanos optaron por mantenerla en el país con la tasa de mortalidad más alta del mundo por covid-19.
«La norma nos da la esperanza de normalidad porque cuando nos vemos entre mascarillas pensamos que todos estamos enfermos todavía», dijo a Efe en el centro de Lima Rubén Díaz, ya sin mascarilla, y quien no estaba del todo de acuerdo con el uso de la mascarilla durante la pandemia pero lo hacía porque «no quedaba otra».
El Gobierno peruano hizo oficial el pasado 23 de abril que, desde el 1 de mayo, las provincias del país que tuvieran más del 80 % de su población mayor de 60 años vacunada con la tercera dosis y más del 80 % con la segunda en mayores de 12 años podrían poner el fin al uso obligatorio de las mascarillas.
Ica, Callao, Áncash, Lima Metropolitana y Lima provincias son las cinco regiones del país que cumplen estos requisitos por el momento.
Pero la capital de Perú no amaneció con la totalidad de los rostros descubiertos y testimonios de ciudadanos como Ollantay Crisóstomo, quien afirmó a Efe que piensa seguir usando la mascarilla, se repetían.
«Ahora es decisión de cuidarse cada uno, no debemos bajar la guardia. Sabemos que la covid-19 todavía está por aquí y nos puede afectar. Sería algo incómodo salir a las calles y veas a otras personas que tienen sus mascarillas y tú no», dijo Crisóstomo en la céntrica Plaza de San Martín.
Por ejemplo, la mayoría de personas que comenzaron a congregarse la mañana del domingo para conmemorar el Día del Trabajador en Lima llevaban mascarillas, lo que mostró que todavía hay una parte de la población que seguirá utilizando el tapabocas por prevención.
EFE
