LA PAZ.- Los líderes de Santa Cruz, la mayor región de Bolivia, se declararon este sábado «en emergencia» y exigieron que cese la «persecución política» a las personas que realizaron la huelga indefinida por 36 días exigiendo censo en 2023 en el país y piden a la población estar «alertas» en caso de ser necesario salir a su defensa.
El Comité Pro Santa Cruz emitió un comunicado expresando su «rechazo y repudio a la persecución política» de parte del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) hacia miembros del Comité Interinstitucional, que impulsaba el censo en 2023.
En el comunicado señalan que «el afán de revanchismo y odio del Gobierno de Luis Arce, utiliza a la Justicia como «su brazo represor», por lo que están iniciando procesos penales en contra de líderes cívicos que protestaron de forma «pacífica» durante 36 días exigiendo censo en 2023 y no el 23 de marzo de 2024, como el Arce determinó a través de un decreto.
Además exigieron a la Justicia boliviana que se «enmarque» en la ley, la Constitución boliviana y los tratados internacionales «respetando las libertades ciudadanas y el estado de derecho».
«Nos declaramos en estado de emergencia y alerta permanente, exigiendo el cese de persecución política. Llamamos al pueblo cruceño estar atento al llamado de sus instituciones, para defender en las calles de ser necesario, a nuestros líderes» finaliza el comunicado del Comité Pro Santa Cruz, liderado por Rómulo Calvo.
El pasado miércoles el subgobernador de la provincia cruceña Ñuflo de Chávez, Daniel Velásquez, sindicado por un incidente con indígenas ayoreos durante la huelga, prendió las alarmas entre los líderes de Santa Cruz ante lo que consideran una «persecución política» y judicial por las movilizaciones por el censo.
EFE
