BUDAPEST.- El Gobierno ultranacionalista de Hungría anunció este sábado que reforzará las vallas de seguridad en las fronteras con Serbia y Croacia para detener a refugiados e inmigrantes.
En un nuevo decreto el Ejecutivo liderado por el primer ministro, Viktor Orbán, indicó que aumentará la altura de las vallas con Serbia de tres a cuatro metros, mientras que construirá nuevas vallas en el Parque Nacional Duna-Dráva, en el tramo fronterizo con Croacia.
El gobierno húngaro no especifica la longitud de la nueva valla, pero sí que para las dos obras se dedicará un máximo de 47 millones de euros.
El gobierno de Orbán viene advirtiendo desde hace semanas de un creciente número de «inmigrantes ilegales» que llegan a Hungría a través de la llamada «ruta de los Balcanes».
Según el ministro de Exteriores, Péter Szijjártó, su número asciende hasta más de 100.000 personas en lo que va del año.
El gobierno húngaro se opone a cualquier tipo de inmigración y en 2015, cuando centenares de miles de refugiados cruzaron el país para seguir hacia Europa central, elevó vallas con concertinas a lo largo de 150 kilómetros de frontera.
EFE