SAN JOSÉ.- El Gobierno de Nicaragua lamentó este sábado el fallecimiento del papa emérito Benedicto XVI y expresó su pésame y condolencias a la Iglesia católica, al sumo pontífice Francisco y a las autoridades religiosas nicaragüenses.
«Nuestro saludo al Santo Padre, la Santa Sede, a sus autoridades, a las autoridades y a los miembros de la iglesia Católica en Nicaragua», dijo la vicepresidenta nicaragüense, Rosario Murillo, en un mensaje divulgado a través de medios oficiales.
Murillo, esposa del presidente Daniel Ortega, afirmó que el Gobierno sandinista está hecho «para la paz, para el amor, para la fraternidad y para la construcción cotidiana del bien común, siempre pensando que ese es el legado que debemos recibir de cada uno, de estas personalidades que hicieron su tránsito como seres humanos en este plano de vida».
Agregó que es importante reconocer el «coraje» que tuvieron personalidades como Benedicto XVI «para asumir las acciones que consideraron necesarias y que marcaron la diferencia en la historia de la iglesia Católica, como dice el Santo Padre, el Papa Francisco, debe seguir cambiando para bien».
EFE