PARÍS.- Los sentimientos de tristeza y soledad aumentaron, o se han mantenido estancados, en la mayor parte de los países de la OCDE, una tendencia que se atribuye en gran parte al impacto de los confinamientos de la crisis de la covid-19 (2019-2022).
Así lo indica el informe publicado este martes por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) titulado ‘¿Cómo va la vida?, 2024’ y que indaga en indicadores de bienestar que no son meramente económicos como el sentimiento de soledad, el número y calidad de interacciones sociales y la ayuda de allegados.
La OCDE, un organismo multilateral con sede en París que agrupa a varias de las principales economías del mundo, detalló que 10 de los 38 países del club registraron un aumento de personas que se declararon tristes entre 2019 y 2023, mientras que solo en cinco hubo mejoras. Los 23 restantes arrojaron un estancamiento.
«El porcentaje de personas que declararon un sentimiento de tristeza creció en los países de la OCDE, sobre todo en el corto plazo», indican los autores del estudio, que sitúa en un 21 % la proporción de personas de los países de la OCDE que dicen haber sentido «mucha tristeza» el día anterior de participar en la encuesta.
Israel, con un aumento de algo más de 10 puntos porcentuales, y el Reino Unido, con cerca de 7, figuran como las naciones con un deterioro más agudo entre 2019 y 2023. Chile consta entre los cuatro países con mejoras, con una caída del sentimiento de tristeza de algo más de 3 puntos porcentuales.
España, por su parte, estuvo estable en ese periodo con un 25 % de sus habitantes reconociendo que se sienten tristes, el séptimo porcentaje más elevado entre los 38 países.
El informe constata que «la prevalencia del sentimiento de tristeza aumentó de ritmo durante la pandemia de la covid».
EFE