CIUDAD DEL VATICANO.-El papa Francisco no estará presente en el viacrucis de este Viernes Santo en el Coliseo de Roma, por seguir convaleciente de su infección respiratoria, pero ha dejado escritas las meditaciones que se leerán y en las que destaca que la «economía de Dios no mata ni aplasta«.
«La vía del Calvario pasa por nuestras calles de todos los días. Nosotros, Señor, por lo general vamos en dirección opuesta a la tuya. Precisamente de ese modo puede ocurrir que nos encontremos con tu rostro, que nos crucemos con tu mirada», así comienzan las meditaciones del viacrucis que en esta ocasión estarán presididas por el delegado del Papa y vicario de Roma, el cardenal Baldassare Reina.
En las 14 estaciones en las que se describe la Pasión de Cristo, el papa hace reflexiones como la que propone abrazar «la economía de Dios, que no mata, no descarta, no aplasta. Es humilde, fiel a la tierra». Y la compara con una economía «deshumana» en la que «noventa y nueve valen más que uno».
«Sin embargo, hemos construido un mundo que funciona de ese modo; un mundo de cálculos y algoritmos, de frías lógicas e intereses implacables», denuncia.
En cada estación, el papa escribe una oración y reza «para desafiar una economía que mata» o «por los que están en las fronteras y sienten que su viaje ha terminado».
En otra oración, el papa pide que conceda paz a la iglesia y «unidad Señor Jesús, que llevas las heridas de nuestra historia. Concede a tu Iglesia paz y unidad Señor Jesús, que conoces la fragilidad de nuestro amor».
En la última estación el papa desea la paz para «todas las naciones». «Que venga tu paz para la tierra, el aire y el agua. Que venga tu paz para los justos y los injustos. Que venga tu paz para quien es invisible y carece de voz. Que venga tu paz para quien no tiene poder ni dinero. Que venga tu paz para quien espera un renacer justo».
EFE