Barcelona.- El Barça dejará de ingresar 55 millones de euros con su traslado al Estadio Olímpico Lluís Companys la próxima temporada.
La vicepresidenta de la entidad azulgrana, Elena Fort, que presentó este martes el Plan de Movilidad del traslado a Montjuïc, destacó «el trabajo y esfuerzo» del club para rebajar en 38 millones las pérdidas previstas por la explotación del estadio.
Para lograrlo, se maximizaron los ingresos por abonos, venta de entradas, zonas VIP y paquetes turísticos. Así como la explotación de la ‘Fan Zone’ con actividades recreativas, de restauración y la venta de productos de ‘merchandising’.
El Barça invertirá en su traslado al Lluís Companys 20 millones de euros, que ya están incluidos en la financiación del ‘Espai Barça’.
La mayoría de ese dinero se destinará a acondicionar el Estadio Olímpico para la alta competición. Aunque también se invertirán 3,32 millones en mejorar la movilidad (el Ayuntamiento de Barcelona invertirá otros 2,58 millones en esta partida).
De los 54.367 localidades que tiene el recinto solo podrán comercializarse 49.472, ya que el resto son de visibilidad nula o muy reducida. El aforo será menos de la mitad del Camp Nou, por eso Fort anunció que en Montjuïc, «todos los socios perderán su condición de abonados y partirán de cero».
De dicha cantidad de localidades se sortearán 27.385 entre los socios abonados que deseen acudir al estadio con precios que oscilarán entre los 723 euros para las zonas de los goles y los 1.738 euros que costará un pase de tribuna.
Los 22.087 asientos restantes se destinarán a la venta de entradas al público en general y a los compromisos comerciales que tiene que atender el club los días de partido.
El Barça estima que, en el Estadio Lluís Companys, disputará unos 40 partidos antes de regresar al Spotify Camp Nou.
Pese a disponer de asiento, el abonado tendrá que comunicar al club, como mínimo con seis días de antelación, si asistirá al partido en cuestión. De lo contrario, el Barça pondrá su localidad a la venta.
EFE