CARACAS.- Todavía sin los lesionados Luka Doncic y Kyrie Irving, Dallas Mavericks tuvo contra las cuerdas a Denver Nuggets este domingo, pero se dejaron remontar y cayeron por 101-112.
Fue un partido muy volátil y de rachas para unos y otros, pero a Dallas (22-17) le quedó el amargo sabor de no haber cerrado la que habría sido su tercera victoria seguida sin sus dos grandes estrellas en acción y de haber desaprovechado un +19 en el ecuador del tercer cuarto.
Así, Denver (23-15), que perdía por 86-67 con 4.49 en el tercer cuarto, tiró de coraje y le dio la vuelta al marcador con un brutal 15-45 hasta el final del encuentro incluyendo un incontestable 12-33 en el último periodo. Los Nuggets llevan ahora tres triunfos seguidos.
Nikola Jokic y Russell Westbrook venían de lograr un triple-doble cada uno en su anterior encuentro y esta vez se quedaron a las puertas: 19 puntos, 18 rebotes y 9 asistencias para el pívot y 21 puntos, 10 rebotes y 7 asistencias para el base.
Jamal Murray fue de menos a más y acabó con 17 puntos y Aaron Gordon, lesionado desde el día de Navidad, regresó con 13 puntos y 6 rebotes y un diferencial +/- de +23 para liderar a una segunda unidad de Denver absolutamente fundamental esta tarde (34 puntos entre todos incluyendo 10 puntos y 6 rebotes de Peyton Watson).
Junto a los reservas, otra clave de Denver fue su dominio de la zona con 55 rebotes (37 de Dallas), 68 puntos en la pintura (40 de los Mavericks) y 27 puntos en segundas oportunidades (8 de los locales).
Klay Thompson (25 puntos con 6 de 13 en triples y 6 rebotes), Naji Marshall (16 puntos y 6 rebotes) y Spencer Dinwiddie (16 puntos y 10 asistencias) marcaron el ritmo de los Mavericks, que tendrán opción de revancha este martes recibiendo de nuevo a los Nuggets.
Dallas golpea, Denver responde
El primer cuarto fue prácticamente perfecto para los de Jason Kidd.
Con 32-17 y tras tener un +17 de máxima diferencia, los Mavericks arrollaron a los Nuggets gracias a un 5 de 7 en triples (0 de 6 de Denver) y un 57,1 % en total en tiros de campo.
Thompson (8 puntos) y Marshall (7) dirigieron la estampida texana, pero en realidad fue un esfuerzo colectivo ya que ocho de los nueve jugadores de Dallas que pisaron la cancha en ese cuarto inicial anotaron al menos 2 puntos.
Los minutos sin Jokic en pista suelen ser un dolor de cabeza para Mike Malone, pero esta tarde la segunda unidad de los Nuggets fue la encargada de liderar la remontada y de colocarse con -7 tras solo cuatro minutos del segundo cuarto.
El cambio de dinámica fue evidente en ese periodo con unos Nuggets mucho más enchufados. Por ejemplo, solo en ese cuarto sumaron 7 rebotes ofensivos y 13 puntos en segundas oportunidades.
Así, con un cuarto para cada equipo, la primera parte se cerró con una ventaja mínima para Dallas (61-58). Thompson (14 puntos) y Marshall (10 puntos) encabezaron a los locales y Jokic (12 puntos y 7 rebotes) y Westbrook (10 puntos) comandaron a los visitantes.
Como en el inicio, los Mavericks salieron del vestuario mordiendo en cada jugada, tanto en ataque como en defensa. Marshall estaba en su salsa, pero fueron dos triples seguidos de Thompson (11 puntos en ese cuarto) los que volvieron a encender las alarmas para Denver (79-67 con 6.38 por jugarse).
Todo eran sonrisas en el ataque de los Mavericks, pero la ofensiva de los Nuggets parecía un velatorio. Ni siquiera Jokic conseguía activar a su equipo, que llegó a perder de 19 en ese tercer periodo. Pero una oportuna reacción final impidió que Dallas rompiera el partido y les permitió llegar con vida al desenlace (89-79).
De nuevo, los mejores momentos de Denver llegaron sorprendentemente con Jokic en el banquillo, tanto que un gran parcial de 4-15, con 8 puntos de Murray y 5 de Gordon, les llevó a culminar la remontada (93-94 con 7.54 para el final).
Ese nuevo golpe de Denver resultó letal para Dallas, que se quedó sin batería y que bajó los brazos en la recta final.
EFE