BRUSELAS.- El presidente del Consejo Europeo, Antonio Costa, felicitó este sábado al presidente francés, Emmanuel Macron, por su «liderazgo» y al pueblo francés por su «ambición» en el día de la ceremonia oficial de reapertura de la catedral de Notre Dame tras el incendio devastador del 5 de abril de 2019.
«Felicito al presidente Emmanuel Macron por su liderazgo y a Francia por su ambición», dijo el ex primer ministro portugués en un mensaje en redes sociales, en el que destacó el «coraje ante la adversidad» y la «resiliencia tras la conmoción» del pueblo francés aquel día de primavera de hace cinco años.
Costa afirmó ver en la reconstrucción de la catedral de Notre Dame un «homenaje a la tenacidad del pueblo francés, que supo resucitar de las cenizas uno de los símbolos de la cultura europea».
De los presidentes de las tres principales instituciones europeas, solo la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, anunció su presencia en la ceremonia de este sábado en París.
El 15 de abril de 2019, Notre Dame quedó envuelta en llamas, un acontecimiento que conmocionó a Francia y a gran parte del mundo.
Macron recibirá esta tarde a los alrededor de cuarenta jefes de Estado y de Gobierno que acudirán a la ceremonia de reinauguración de la catedral a partir de las 18:15 horas locales.
La lista incluye a los reyes de los belgas Felipe y Matilde; al presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier; a la primera dama de Estados Unidos, Jill Biden; al jefe de Estado paraguayo, Santiago Peña, o al de la República Democrática del Congo, Félix Tshisekedi.
También estará entre los invitados el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y el próximo inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, en el que será su primer viaje internacional tras haber ganado las presidenciales estadounidenses de noviembre pasado.
Inicialmente, Macron debía tomar la palabra en la explanada de la catedral pocos minutos después del comienzo de la ceremonia, con el objetivo de dividir el acto en dos tiempos marcados, por un lado, una ceremonia oficial, política y laica, y posteriormente otra más puramente religiosa en el interior, con el arzobispo de París, Laurent Ulrich, como protagonista.
Sin embargo, la diócesis de París y la Presidencia de la República, informaron a última hora del viernes de que toda la ceremonia tendría lugar en la catedral debido a la previsión meteorológica, que anunciaba rachas de viento de entre 65 y 80 kilómetros por hora en la región.
EFE