CARACAS.-Una ciudadana estadounidense, se convirtió en la cuarta persona en el mundo y la primera mujer en ser curada del VIH, tras haber recibido un trasplante de células madres que fue combinado con las de una pariente para tener más posibilidades de éxito.
La paciente además padecía de leucemia, enfermedad que necesitaba un trasplante de médula.
El caso de esta mujer neoyorquina se dio a conocer hace un año, pero es hasta ahora que se revelaron los resultados de la investigación, encabezada por la Universidad de California (UCLA) y la Johns Hopkins.
De acuerdo a la información de RTVE, este caso «tiene varias peculiaridades frente a los otros, la primera que se sometió a un trasplante de células madre resistentes al VIH procedentes de sangre de cordón umbilical y no de un donante adulto compatible».
El equipo considera que el tratamiento ha dado “resultados satisfactorios a largo plazo”, indica el estudio, y que el uso de células madres de sangre de cordón umbilical aumenta la posibilidad de curar el VIH en personas de todos los orígenes raciales”.
Reseña el portal web de RTVE
¿Qué son las células madres del cordón umbilical?
Este tipo de células son formadoras de sangre inmadura y que por lo general se encuentran en la médula osea y en la sangre de todas las personas.Las mismas tienen la tarea de transformarse en glóbulos rojos o blancos, así como plaquetas, estos representan mecanismos de defensa para mantener una buena salud.
La obtención de este tipo de células se realiza en el mismo momento del nacimiento de un nuevo ser; el medicó debe cortar el cordón y posterior a eso, recoger alrededor de 3 a 5 onzas de sangre del cordón umbilical y la placenta.
Luego de eso la sangre pasa a ser analizada por un laboratorio y resguardada en un banco de sangre especializado hasta que llegue el momento de hacer uso de ella.
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Actualmente hay empresas especializadas en la recolección y almacenamiento de este tipo células para tratamientos posteriores de familiares directos o hasta del mismo recién nacido.
Unión Radio/RTVE/La Vanguardia
