CARACAS.- Este domingo el equipo Red Bull consiguió su tercera victoria en la historia del circuito de Bakú, Azerbaiyán, gracias al uno-dos que conformaron Max Verstappen y Sergio «Checo» Pérez en la octava prueba de la temporada que los mantiene como absolutos dominadores de la Formula 1.
Día redondo para la escuderia energética que aprovechó, una vez más, una jornada de terror para Ferrari, su máximo contrincante en el año, quien perdió a sus dos pilotos antes de si quiera llegar a la mitad del Gran Premio, lo que supone un duro golpe para el conjunto de Maranello al seguir perdiendo terreno frente a los «Toros Rojos».
Y es que precisamente un cavallino rampante, el de Charles Leclerc, era el que partía desde el frente de la parrilla siendo escoltado por Pérez y Verstappen, quienes debían cuidarse al mismo tiempo de Carlos Sainz en la otra Ferrari F1-75 que salía desde la 4ta colocación.
Al apagarse las luces del semáforo todos los autos salieron disparados en la larga recta del circuito callejero frente a una afición que estalló de jubilo en la primera curva con el adelantamiento de «Checo» sobre el piloto monegasco para tomar la batuta de la carrera.
El mexicano tuvo mejor tiempo de reacción que el líder, lo que le sirvió para ponerle el RB18 por delante sacando ventaja de la cuerda al momento de doblar. Este mismo hecho intentó copiarlo «Mad Max» para subir al segundo lugar y evitar que se le escapara su compañero, pero Leclerc lo evitó por todos los medios y mantuvo su posición.
Fue una partida limpia en general. No se presentó ningún incidente en el comienzo como se esperaba en la previa, lo que era un alivio para los equipos, y llevaba a dirigir todas las miradas al frente del pelotón donde Pérez se escapaba, Leclerc y Verstappen peleaban por ser el escolta de la prueba y Sainz se quedaba rezagado observando todo desde atrás.
Pero fue precisamente el español el que haría que se produjera el primer Virtual Safety Car del día con apenas nueve giros completados, cuando un problema hidráulico le impediría doblar en la curva 4, obligándolo a estacionar el vehículo en la zona de escape debido a que no podía girar el volante. Un nuevo abandono en la lista del conductor número 55.
Pese a esto, la mala suerte de un Ferrari benefició al otro, pues eso le permitió a Leclerc ir rápidamente a los boxes por un juego de neumáticos duros nuevos (la gama blanca) sin perder tanto tiempo e ir hasta el final de la carrera con ellos.
La decisión tomó por sorpresa a Christian Horner (director de Red Bull) y todo su equipo, puesto que aunque tenía a sus dos autos liderando, estarían en desventaja pocas vueltas después por tener las llantas más desgastadas, por lo que caerían al 2do y 3er puesto. Situación que terminó produciéndose.
El de Mónaco volvía a estar primero y tenía un ritmo arrollador marcando constantemente vueltas rápidas, mientras que los Red Bull apenas comenzaban a rodar con el mismo compuesto este había calzado mucho antes. La estrategia había funcionado y todo marchaba bien, hasta ese momento.
El paseo de la felicidad volvería a convertirse en uno de pesadilla para Leclerc, cuando el motor le dijo «no más» y estalló al comienzo de la recta principal para dejar con las manos vacías a Ferrari por segunda ocasión en el año. Nuevo fracaso para una scuderia italiana que no puede sumar buenos puntos desde que el calendario entró en su etapa europea.
En declaraciones posteriores, el monegasco resaltó que «Duele. Realmente tenemos que investigar eso para que no vuelva a suceder. Realmente no puedo encontrar las palabras adecuadas para describirlo. Es muy decepcionante».
A partir de ese momento no hubo más competencia. La carrera fue en un solo sentido con Verstappen y Pérez comandando sin que nadie que los apretara y con gran ventaja sobre quien, al final, terminó completando el podio, George Russell (Mercedes), el piloto más consistente de la categoría al llegar hasta el final en las ocho carreras disputadas dentro del top cinco.
Como hecho a resaltar, el equipo alemán también sacó provecho del desastre ferrarista al acabar con el tercero y cuarto lugar de un Lewis Hamilton que se quedó con un gran dolor de espalda por el constante rebote que tiene su W13, pero también con el premio al Piloto del Día.
En cuanto a los campeonatos, Max Verstappen siguen al frente del de pilotos con 150 puntos, ahora seguido de cerca por «Checo» Pérez que alcanzó las 129 unidades para superar las 116 de un Charles Leclerc que no pudo sumar para su beneficio.
Por otra parte, en el de constructores Red Bull ascendió a 279 puntos, 80 más que Ferrari que se mantiene en el segundo lugar.
Deinelbith Blanco/Unión Radio