JERUSALEN.- La Autoridad Nacional Palestina (ANP) rechazó las «directrices políticas anexionistas y racistas» del nuevo gobierno de Israel, encabezado por el derechista Benjamín Netanyahu y sus socios ultranacionalistas y antiárabes, quienes han defendido la anexión de Cisjordania ocupada.
En un comunicado difundido hacia la media noche del jueves, el Ministerio de Asuntos Exteriores de la ANP «rechaza las directrices políticas anexionistas, violentas, racistas y de incitación a la limpieza étnica del nuevo gobierno de Israel», cuya agenda representa una «amenaza existencial para el pueblo palestino y sus derechos inalienables».
Netanyahu juró el jueves por sexta vez como primer ministro de Israel, asociándose con formaciones de la extrema derecha supremacista judía y conformando el gobierno más derechista desde 1948, cuando se fundó el país.
Entre sus principales aliados se encuentran el extremista Bezalel Smotrich, que lidera el partido Sionismo Religioso, y el antiárabe Itamar Ben Gvir, líder del partido Poder Judío y quien en el pasado fue condenado por incitación al racismo y apoyo a grupo terrorista. Ambos habitan asentamientos judíos en Cisjordania ocupada y su base política está formada mayoritariamente por colonos.
En su acuerdo de coalición con Sionismo Religioso, Netanyahu se compromete en principio a anexionar Cisjordania ocupada al afirmar que la «soberanía israelí se extenderá a Judea y Samaria» (como se refieren a Cisjordania), aunque estará sujeto a la «ponderación de los intereses nacionales e internacionales de Israel», a criterio del primer ministro.
En lo pactado con Poder Judío -partido en cuyos mítines se grita «muerte al árabe»-, figura la prohibición de la bandera palestina en instituciones educativas y locales; así como el establecimiento de la pena de muerte para los condenados por terrorismo, cargos que suelen pesar sobre palestinos que cometen ataques contra objetivos israelíes.
«La paz y la seguridad internacionales están siendo atacadas, lo que exige una movilización internacional rápida e inequívoca a nivel bilateral y multilateral, incluido el Consejo de Seguridad, para garantizar la protección del pueblo palestino frente a la actual campaña israelí de desposesión y desplazamiento, colonización, anexión, limpieza étnica y persecución», apuntó la ANP.
Considerando que el nuevo gobierno israelí «encarna la antítesis de los principios de integridad territorial, soberanía e independencia política», la ANP advirtió que «el pueblo palestino no cejará en su legítima búsqueda de la libertad y la autodeterminación».
El conflicto israelí-palestino se agudizó durante 2022, convirtiéndose en el año más letal desde 2006, con 170 palestinos muertos en incidentes violentos con Israel, según el recuento del Ministerio de Sanidad palestino; y una treintena de víctimas de lado israelí en ataques por parte de palestinos y árabes israelíes.
Israel se hizo con el control de Cisjordania en la Guerra de los Seis Días de 1967, y desde entonces, mantiene una ocupación militar sobre este territorio.
EFE