CARACAS.- La biólogo y experta en temas ambientales en espacios públicos y comunidades, Esmeralda Mujica, explicó que las serpientes son animales de sangre fría y siempre buscarán los rayos del sol para regular su metabolismo, en estos casos siempre puede existir un contacto con los humanos.
Estos reptiles, en época de lluvia, buscan ocultarse en casas o senderos, «la serpiente no está esperando a ningún humano para morderlo, es una reacción ante una amenaza que está en su territorio».
Ante una eventual mordedura, Mujica aconsejó en primer lugar, tomar la foto de esa serpiente para así determinar el posible suero antiofídico a la hora de llegar al centro médico.
«Ellos tienen que ver si es una culebra ponzoñosa o una culebra no venenosa», dijo.
Exhortó a las personas a realizar jornadas de limpiezas en casas y cerrar toda rendija o espacio reducido donde se pueda meter este animal.
Referente a las áreas verdes en Caracas, recordó que muchas edificaciones están construidas en hábitat donde viven estos animales, como zonas de montañas o quebradas.
En entrevista con Esteninf Olivarez y Luis Miguel Núñez para Unión Radio, la catedrática recordó que Venezuela tenía uno de los centros más importante de la elaboración de suero antiofídico. Pidió que se actualicen estos centros y que se doten de insumos para así atender a posibles vÍctimas y resguardaR la vida de los mismos.
Serpientes en Venezuela
De acuerdo al portal, «sostelemedicina.ucv», el mayor número de accidentes es causado por serpientes del género «Bothrops, Bothriechis, Bothriopsis y Porthidium«, mapanares y tigras mariposas, con un porcentaje alrededor del 80%.
En el diagnóstico del accidente ofídico estos tienen sus fundamentos en el conocimiento detallado de las características del cuadro clínico y la actividad fisiopatológica del envenenamiento.
La distribución geográfica es amplia en el territorio; predominan como zonas endémicas, áreas tropicales y subtropicales, principalmente aquellas representadas por bosques húmedos del piso tropical y subtropical, piedemontes, márgenes de ríos y quebradas. Son serpientes agresivas que en muchas ocasiones pueden provocar accidentes graves
