ISLAMABAD.- Al menos 43 personas han muerto y 151 han resultado heridas tras seis días de enfrentamientos entre dos tribus del noroeste de Pakistán, afirmó este lunes una fuente policial, una violencia en la que ambas partes han recurrido a armamento pesado como disparos de mortero y lanzacohetes.
«Inicialmente se trataba de una disputa por la propiedad de un terreno, pero ahora el incidente se ha convertido en un caso de violencia comunitaria en la que 43 personas murieron y 151 resultaron heridas», dijo a EFE Hashim Khan, un oficial del cuartel de Policía del distrito de Kurram, en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa.
Los enfrentamientos comenzaron el pasado miércoles, cuando dos tribus rivales recurrieron a las armas debido a la disputa sobre la propiedad de tierras.
Khan afirmó que ambas partes han cavado trincheras y búnkeres en sus zonas y poseen metralletas, morteros e incluso lanzacohetes.
«Algunos cohetes fueron disparados también contra la ciudad de Parachinar», afirmó la fuente, quien señaló que las fuerzas de seguridad han evacuado «más del 70 %» de las fortificaciones en la zona donde transcurren las hostilidades.
El pasado domingo, una asamblea de líderes de la comunidad celebró una serie de negociaciones entre ambas tribus, durante las cuales se acordó un alto el fuego. Sin embargo, Khan señaló que hoy se reportaron tiroteos en varias partes.
Las autoridades recurrieron a cerrar carreteras de la provincia y bloquear las redes de telecomunicaciones, añadió. Este distrito fronterizo con Afganistán ya fue testigo en 2007 de un importante conflicto tribal que duró años, y solo acabó en 2011 con la intervención de líderes comunitarios.
Al menos diez personas murieron en este mismo distrito en julio del año pasado, en una disputa por la propiedad de varias tierras similar a la actual. El Departamento de Interior y Asuntos Tribales de Khyber Pakhtunkhwa afirmó en aquella ocasión que hay ocho disputas de tierras en diferentes partes de Kurram, y la mayoría se remontan a la época anterior a la independencia.
EFE