CARACAS.- El gobernador de Táchira, Freddy Bernal, resaltó que el estado andino se ha convertido en un «estado de paz y libre de paramilitarismo», a raíz de las políticas de seguridad implementadas desde hace dos años, que han «limpiado de paramilitarismo la zona».
«No hay secuestro, no hay extorsión, no hay robo de vehículos, ni crímenes horrendos; el pasado oscuro del Táchira nunca va a volver», un balance que se desprende de una «la lucha contra las mafias» que desde la gobernación se ha implementado.
Aunado a esto, subrayó la importancia de la mejoría y el restablecimiento de las relaciones con Colombia, que se traducirá en la reducción de delitos como el contrabando de gasolina y el narcotráfico, tarea que admite no será fácil, pese a la voluntad que desde el Ejecutivo colombiano se ha evidenciado.
«Cuando yo llegué al Táchira por lo menos 30 % de la economía se basaba en el contrabando de gasolina, no digo que no haya pero el contrabando como tal, pero ya no es un hecho con respecto a la gasolina», manifestó en entrevista con Marypili Hernández, en Unión Radio.
«Las relaciones con Colombia van a permitir que coordinemos, ya está enlazada la policía de Colombia y Venezuela y el Ejército y eso va a garantizar una zona de paz porque no hay amparo (…) En las semanas y meses por venir las cosas se irán solucionando, Táchira quizá no sea una zona sin problemas, es una frontera caliente (…) Pero ahora hay voluntad política de ambas naciones, y una articulación entre ambos estados para que si alguien comete un delito, apretamos aquí, apretamos allá, cosa que no ocurrió en siete años».
Bernal acotó que el trabajo mancomunado con el resto de los alcaldes, de diversas tendencias políticas, ha propiciado los cambios en la entidad andina, relacionados a la seguridad y al comercio.
LA ECONOMÍA EN TÁCHIRA
La reapertura fronteriza incidirá de manera significativa en el comercio de ambas naciones durante 2023, con un flujo monetario que se estima en más de 1.5 millones de dólares y, por consecuencia, la apertura de comercios, hoteles, posadas y empleo.
«En 2008 tuvimos una balanza comercial de 7.5 millones de dólares entre Colombia y Venezuela, debido al cierre y sanciones cayó a 300 millones de dólares al año, solo entre octubre y diciembre se movieron 700 millones de dólares en la frontera. Ha comenzado poco a poco la reactivación», precisó.
Unión Radio