PARÍS.- Más de 11.300 personas han tenido que ser evacuadas por los dos incendios que se declararon el martes al sur del departamento de Gironde, con capital en Burdeos, y que hasta primera hora de la tarde de este viernes han dejado calcinadas 7.650 hectáreas de bosque.
La Prefectura (delegación del Gobierno) explicó en un comunicado que en la zona de Arcachon han sido desalojadas de sus casas y de varios cámpings 10.000 personas por el fuego que se declaró en el municipio de La Teste de Buch, que hasta las 13.00 locales (11.00 GMT) ha quemado 3.150 hectáreas de monte.
Las llamas han alcanzado el lago de Cazaux y progresan hacia el sur, según la Prefectura, que se esforzó en subrayar que la situación es favorable en el pueblo de Cazaux, donde después de que ardieran por la noche varias viviendas y restaurantes, los bomberos consideran que han quedado en seguridad un centenar de casas.
En el otro incendio del departamento, en Landiras, han ardido 4.500 hectáreas y 1.300 personas han sido desalojadas en total. Hay varias carreteras cortadas en la zona y una vivienda quedó destruida en Guillos.
No está controlado ninguno de los dos, en cuya extinción trabajan más de 1.100 bomberos, pero por ahora las autoridades no tienen constancia de víctimas personales.
A varios cientos de kilómetros de allí, en el valle del Ródano, otro fuego que se inició el jueves y que esta mañana se consideraba fijado, corría el riesgo de reavivarse a causa de los cambios de viento, indicó el alcalde de Tarascon, Lucien Limousin, en declaraciones al canal BFMTV.
Más de 600 bomberos, apoyados desde el aire por dos hidroaviones de tipo Canadair y dos bombarderos de agua Dash trataban de apagarlo.
El presidente francés, Emmanuel Macron, se desplazó a primera hora de la tarde desde el Palacio del Elíseo hasta el Ministerio del Interior para informarse de los dispositivos en marcha para luchar contra el fuego a los que manifestó su apoyo.
«Estamos viviendo una estación excepcional por su dureza. Tenemos ya tres veces más superficie de bosque quemado que en 2020», declaró ante los medios Macron, que recordó que la primavera había sido muy seca.
El presidente hizo notar que Francia se está beneficiando ahora de la «solidaridad europea», de la misma forma que prestó su ayuda en el pasado, y agradeció e envío por Grecia de aviones que han llegado este viernes a Francia y otros de Italia que se esperan para los próximos días.
EFE