ROMA.- Miles de taxistas italianos protestaron hoy en Italia, en plena temporada turística y en medio de fuertes tensiones políticas en el Gobierno, por la falta de un acuerdo con el Ejecutivo para cambiar un nuevo decreto que plantea la liberalización del sector.
Las calles de las principales ciudades italianas se volvieron a vaciar de taxis después de la fallida reunión en Roma entre los representantes del sector y el ministro de Infraestructuras, Enrico Giovannini, para modificar uno de los artículos del nuevo proyecto de «ley de competencia» en el que se incluye la posibilidad de liberalizar el sector para «una mejor protección al consumidor«.
El artículo apunta que el Gobierno debe promover «la competencia, también en el otorgamiento de licencias, con el fin de estimular mayores estándares de calidad», lo que hizo saltar las alarmas delos taxistas, que se han opuesto durante décadas a cualquier intento de liberalizar el mercado con medidas como un aumento de las licencias disponible.
Por este motivo, los taxistas volvieron a manifestarse por tercer día consecutivo cortando vía del Corso, una de las arterias principales de la capital italiana, con pancartas y bengalas para pedir que escuche sus propuestas y con mensajes en contra de Uber.
Los manifestantes se agruparon delante del Palacio Chigi, sede del Gobierno, en un momento de fuertes tensiones políticas que podrían causar el final del Gobierno de Mario Draghi.
A diferencia de las jornadas precedentes, donde las protestas se repitieron en otras grandes ciudades como Nápoles (sur), Turín y Milán (norte), este jueves también se sumaron los taxistas de Cerdeña (sur), que pararon sus coches dejando sin transporte a los turistas y vecinos de esta isla italiana.
Uno de los motivos por los que los profesionales de los «coches blancos», como se les conoce por el característico color de los taxis en este país, es que se autorice a las empresas de servicios de viaje compartido como Uber a operar este servicio.
«Lo que más tememos es que nos pongan a competir con servicios que no tienen las mismas reglas y ahí morimos. O nos ponen las mismas reglas que a ellos o viceversa», explicó hoy el presidente del sindicato de taxistas italianos, Uritaxi, en una entrevista en Radio Cusano, donde señaló que la reciente investigación a Uber deja ver hay «un ecosistema hecho de presiones y de actividades de lobby».
EFE