BRUSELAS.- El Consejo de la Unión Europea, la institución que representa a los países, expresó este miércoles «fuertes reservas» al plan presupuestario propuesto por el Parlamento Europeo para sí mismo en 2023, un movimiento muy inusual que se debe, según los Estados miembros, a la solicitud de la Eurocámara de aumentar en casi 170 puestos su personal el año próximo.
El Consejo, que adoptó este miércoles su posición para negociar con el Parlamento la totalidad del presupuesto de la UE para 2023, criticó duramente los planes de gasto de la propia Eurocámara, con 52 nuevos puestos y 116 asistentes acreditados más que se suman a los 142 puestos y 180 personal adicional externo que ya había solicitado para 2022.
Este órgano explicó que, debido a la inflación elevada, ya hay un riesgo de que no se respete el techo de gasto de la sección del presupuesto europeo de donde obtienen sus recursos las instituciones europeas, por lo que la solicitud presupuestaria del Parlamento obligaría al resto de instituciones a «soportar la carga de contener sus gastos administrativos».
Las reservas de los Estados miembros llegan en el contexto de los planes para crear una nueva dirección general en el Parlamento Europeo que se atribuiría al grupo de la Izquierda a cambio de que esta pequeña formación se sume a una coalición para elevar al actual jefe de gabinete de la presidenta Roberta Metsola, Alessandro Chiocchetti, a secretario general de la institución.
EFE