RIO DE JANEIRO.- El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, sustituyó este miércoles a su ministro de Minas y Energía, Bento Albuquerque, pocos días después de haberle criticado públicamente por permitir que la petrolera estatal Petrobras anunciara un nuevo aumento en los precios del diesel.
De acuerdo con un decreto publicado hoy en el Diario Oficial y que no había sido anunciado previamente, el líder ultraderechista sustituyó a Albuquerque, un almirante de la Marina y que era uno de sus principales hombres de confianza, por el economista Adolfo Sachsida.
Pese a que el decreto afirma que el relevo fue hecho a petición del ministro saliente, el sorpresivo cambio en el Gabinete se produjo tan sólo seis días después de que el jefe de Estado lanzara duras y públicas críticas a su ministro y al presidente de Petrobras, José Mauro Coelho, por los continuos ajustes en los precios de los combustibles.
Petrobras, que tiene una política de paridad de precios por la que repasa en el mercado brasileño la cotización internacional del crudo, anunció esta semana un nuevo aumento del diesel, el principal combustible usado por los camiones en Brasil, en un ajuste que puede presionar aún más la creciente inflación, que ya se acerca al 12 % interanual, a pocos meses de las elecciones presidenciales.
«Ustedes, ministro Bento Albuquerque y señor José Coelho, de Petrobras, no pueden aumentar el precio del diesel. No estoy rogando. Estoy transmitiendo una constatación teniendo en cuenta el lucro abusivo que ustedes consiguieron«, dijo Bolsonaro en una transmisión en directo en redes sociales al referirse al beneficio neto récord anunciado ese mismo día por la petrolera estatal.
«Ustedes no pueden quebrar Brasil. Ahora sí es una petición: Petrobras no quiebre a Brasil. No aumente el precio de los combustibles. Yo no puedo intervenir (en la empresa), pero ustedes tiene un gran lucro y tienen el papel social de Petrobras definido en la Constitución», agregó el mandatario.
Bolsonaro, que aspira a ser reelegido en octubre próximo pero aparece en segundo lugar en las encuestas a gran distancia del favorito, el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, calificó a los gritos las ganancias de Petrobras como una «violación» que tan sólo beneficia a inversores extranjeros.
Pese a ser de control estatal, Petrobras tiene acciones negociadas en las bolsas de valores de Sao Paulo, Nueva York y Madrid, y reglas que impiden una intervención directa del Estado.
EFE