SEÚL.- Corea del Norte tachó este sábado de «ilegal» la declaración de la cumbre de la OTAN celebrada esta semana en Washington que condenaba las exportaciones de armas norcoreanas a Rusia, y amenazó con «acciones estratégicas» en respuesta.
A través de un portavoz del Ministerio de Exteriores norcoreano, el régimen que lidera Kim Jong-un reaccionó así al documento acordado durante la cumbre de la OTAN, en la que además de los 32 países de la alianza atlántica, participaron sus cuatro socios en el Indopacífico: Japón, Corea del Sur, Australia y Nueva Zelanda.
Corea del Norte «denuncia con toda firmeza y rechaza la ‘declaración’, un documento ilegal que viola los derechos legítimos de estados soberanos independientes», señaló el portavoz en un comunicado recogido por la agencia estatal KCNA.
El portavoz también señaló que la declaración de la OTAN refleja «un programa de confrontación que incita a una nueva Guerra Fría y al conflicto militar a escala global».
Asimismo, advirtió de que Pionyang «nunca pasará por alto o evitará la grave amenaza», sino que «disuadirá de la agresión y de la guerra con un nivel más alto de acciones de respuesta estratégicas, y defenderá la paz y la seguridad en la región y en el resto del mundo».
En su declaración conjunta, los líderes de la OTAN señalaron que Corea del Norte e Irán «están alimentando la guerra de agresión contra Ucrania al proveer apoyo militar directo a Rusia, como municiones y vehículos aéreos no tripulados, lo que impacta seriamente la seguridad Euro-Atlántica y socava el régimen de no proliferación».
El documento también condena las exportaciones de artillería y misiles balísticos de Corea del Norte, «que suponen una violación de numerosas resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas», y expresa una «grave preocupación» por el estrechamiento de los lazos entre Pionyang y Moscú.
EFE