CARACAS.- Pinceladas blancas, amarillas y azules visten las habitaciones y pasillos de la experiencia “Van Gogh: el sueño inmersivo”; exhibición que recopila casi 200 obras del pintor neerlandés y estará vigente hasta finales de año, según lo previsto por los organizadores.
Al llegar a la gran carpa, el público queda arropado por un calmo ambiente; el contraste de las salas hace que cada minuto valga la pena e invita a conocer un poco más de todo aquello que simbolizó cada obra de Van Gogh, entre las que destacan: La noche estrellada, La habitación, Los Girasoles, Flores y mariposas, otros.
La atracción principal se centra en un cuadrado, amplio y cómodo; con pantallas de más de tres metros de altura y puff para quienes deseen sentarse a contemplar cada adaptación ditigal; en este punto, tomar fotos desde cualquier ángulo, bajo cualquier color y efecto o permanecer acostado en el suelo resulta válido.
El arte va más allá
Entre los asistentes, Gabriela Reyes, estudiante de psiquiatría, detalló que su interés por el pintor nace debido a su biografía y su condición clínica; para ella “el arte va más allá y las personas van más allá de los trastornos mentales”.
Tan solo 45 minutos son necesarios para que los asistentes puedan apreciar cada momento del “sueño inmersivo”.
La exhibición de Van Gogh no muestra lienzos, por lo que el recorrido va apegado a lo sensorial y enigmático. El proyecto llega a Caracas tras concluir temporada en al menos 65 países y el valor de los boletos es de $25 para cualquier función y día disponible.
Luis Gabriel Patiño/ Unión Radio
